SERPAJ-E
21-SEP-2012
Procurar
vivir en un mundo donde diariamente se
trabaje por la paz, es un deber al cual todos y todas estamos llamados(as)
desde nuestra cotidianidad. Con el pasar del tiempo, nuestras sociedades han
venido dejando una huella que nos invita
a reflexionar sobre cómo, a través de diferentes actos, la violencia se ha convertido en el principal
argumento natural para cumplir objetivos; dejando en último lugar al ser humano
como elemento esencial en la búsqueda de sociedades-comunidades-localidades, más
comprometidas a construir y vivir una Cultura de Paz.
Diariamente
somos testigos - en nuestros hogares,
trabajos, barrios, unidades educativas, parques, escenarios deportivos, medios
de comunicación, etc. - de hechos que
vulneran nuestros derechos y que se
encuentran distantes a la paz ¿Qué hacemos? ¿Cuáles son nuestras miradas? ¿Cómo
tratar que esto cambie? Son algunas de las preguntas que se encuentran en
nuestro interior, mientras observamos estos acontecimientos, muchas veces con pasividad.
La
necesidad de empoderarnos de aquellos espacios comunes que nos permitan pensar
y construir la Paz desde el diálogo, la
solidaridad, el respeto a la diversidad, el cooperativismo, la educación son puntos
importantes que nos ayudarán a crear realidades distintas , plasmadas en un
nuevo compromiso y sentido, basado en otras formas de convivencia humana y
construcción de comunidad.
Al cumplirse treinta y un años desde la
primera declaratoria del Día Internacional por la Paz en 1981 por las
Naciones Unidas, dedicado a fortalecer
los ideales de la paz entre todas las naciones, creemos que es importante
seguir generando acciones que permitan trabajar sobre aquellos aspectos que
fortalecen la cultura de la violencia.
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