Desde La Carta 457 del Ceaal
En el Perú, el 60% de los conflictos sociales son de carácter socio ambiental y de éstos el 50% tienen como centro de conflicto al agua, especialmente en los distritos donde se asienta la minería y en las cabeceras de cuenca ubicadas en la cordillera occidental. Una expresión del conflicto entre minería y agua es la que se vive en Cajamarca, departamento al norte del país en donde el movimiento social está protestando contra el proyecto minero Conga el cual afectaría 4 de sus principales lagunas, por ello desde el primero de febrero diversas s organizaciones cajamarquinas, partieron en una marcha de protesta recorriendo más de 700 Km hasta llegar a Lima, ciudad capital, sumándose en el camino organizaciones de otras regiones del país en lo que se ha denominado la Gran Marcha Nacional por el Agua que culminó el viernes 10 en Lima.
Y es que la problemática del agua atraviesa a diversas regiones del país y está vinculado a problemas que afectan a sus fuentes, su distribución y el uso de este vital elemento que ya las Naciones Unidas ha reconocido como un derecho humano por su importancia para la vida. Solo en Lima aún hay más de 853 mil personas que carecen de agua y desagüe, o cuentan con acceso de baja calidad, siendo los sectores más pobres de la ciudad quienes deben pagar más para contar con este recurso para sus familias. Por ello en Lima Norte, el pasado 7 de febrero grupos organizados de mujeres, hombres y jóvenes señalaron como prioridad la necesidad de que se constitucionalice el derecho al agua y considerarla como una prioridad en el Plan Nacional de DDHH 2012-2016; proteger las cabeceras de cuenca y los ecosistemas hídricos; establecer políticas de ordenamiento territorial; y promover una nueva institucionalidad para el agua con la participación ciudadana y la participación del gobierno local.
Ver Carta CEAAL 454
Maritza Caycho, Alternativa, CEAAL, maritza@alter.org.pe
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